Por qué me jubilé a los 32 | Carl Seidman | TEDxIIT

Esta charla es de un evento TEDx, organizado de manera independiente a las conferencias TED. Más información en: http://ted.com/tedx

La Generación del Milenio pronto formará parte del 60 % de la población activa que cause la mayor ruptura en la manera de trabajar y vivir de los estadounidenses. Las compañías deben adaptarse y satisfacer sus necesidades. La solución es que estos trabajadores hagan algo al respecto.

Carl es un asesor de gestión estratégica, cuyas perspectivas de vida y trabajo le llevaron a sentirse atraído por los negocios y el periodismo a través del mundo.

Ha trabajado con casi 200 compañías y ciento de profesionales, adaptando el crecimiento de los negocios con las relaciones interpersonales y la comunicación. Carl ayuda a dirigir las culturas de trabajo en el oficio fortalecido y da charlas a jóvenes profesionales para aumentar su confianza, estimular sus ideas y que estos comiencen a estar más comprometidos en su lugar de trabajo.

Parafraseando a Edward Rooney,

lo principal en "Todo en un día",

es dar a chicos buenos, malas ideas.

Les decimos que vayan al colegio,
que estudien mucho y saquen buenas notas.

Y si lo hacen,

estarán dentro del mercado,
en un puesto bueno y seguro.

Y cuando lleguen a los 40 o 50 años,

tendrán ahorros suficientes
y beneficios para jubilarse

y vivir bien el resto de tu vida.

Es una idea bastante idílica,

ya que actualmente casi nadie
de este país tiene ahorros.

La mayoría de los estadounidenses no tienen
la jubilación cubierta por sus empleadores

además, justo el pasado enero dijo
la Administración de la Seguridad Social

que la media mensual en beneficio
rondaba los USD 1300,

lo cual no te llevará muy lejos
en una ciudad como Chicago.

Y encima, ahora vivimos más.

Hace un par de años,
Prudential reveló una pancarta

que decía que ya ha nacido
la primera persona

que vivirá hasta los 150 años.

¿Lo imaginan? ¿Vivir tanto?

Bajo esas circunstancias, podrían
seguir siendo interno con 50 años,

y al llegar a los 70, darse cuenta
de estar a medio camino de jubilarse.

Y cuando vas a
tu asesor financiero te dirá:

"Bueno, tengo buenas y malas noticias.

Las malas son que apenas
tienes dinero para jubilarte.

y las buenas son, que aún te
quedan 30 años más para eso".

(Risas)

Ahora en serio,

estamos en una era en la que
la mayoría de este país

no podrá jubilarse por propia elección.

En vez de eso, nos obligarán
a trabajar hasta los 70 u 80 años,

o incluso más.

Si esta es la nueva realidad,

¿cómo pueden asegurarse que
vivirán bien el resto de su vida

si la dedican enteramente a trabajar?

Necesitamos reinventar y redefinir
lo que significa jubilación,

como también la manera de llegar a ella.

En vez de esperar hasta el final
de nuestra vida para jubilarnos,

deberíamos tomar pequeñas jubilaciones
provisionales durante nuestra vida,

dándonos la oportunidad de
actualizarnos, activarnos,

y reinventarnos a nosotros mismos
y a nuestras carreras.

Temo que, si nada cambia,

vamos camino de la peor crisis
socioeconómica que este país ha tenido.

Uno de los principios más importantes
de la economía financiera

es la diversificación
de la cartera de valores,

lo que simplemente significa:
no pongan todos los huevos en una canasta.

Extiendan su riesgo a otras partes.

Por ejemplo, en vez de gastar
todo su dinero en comprar una casa,

deberían gastar una parte en la casa,

pero guardar algo de dinero

para hacer otras inversiones.

De manera que si hay
una caída en el sector inmobiliario

como ocurrió hace unos años,

la pérdida no es tan grande,
por la diversificación en otras áreas.

Irónicamente, cuando se trata
de nuestra educación y profesiones,

hacemos exactamente lo contario.

a los 18 años, diremos que piensen
lo que quieren hacer,

supuestamente para el resto de la vida.

Aunque a esta edad,
aún es ilegal beber cerveza.

(Risas)

Entonces, cuando comienzan a trabajar,

dirán que son muy buenos
en una función particular del trabajo.

Y no se esperará que se diversifiquen,

como tampoco que persigan otros intereses,

porque la creencia general es,
si siguen este camino,

tendrán éxito,

y si no lo hacen o cambian a otro,

incrementan el riesgo de fracasar.

Pero ninguna de estas suposiciones
es verdad.

Actualmente, nuestro mundo
está cambiando rápidamente.

Desde el momento en que los jóvenes
se gradúan en la escuela,

entran en un mundo diferente

preparados por su educación.

El valor y habilidades que
llevamos a nuestros trabajos

en un breve período de tiempo
serán reemplazados por la tecnología

o todo será irrelevante.

Si la diversificación de la cartera es tan
importante en las economías financieras,

¿no tendría sentido hacer lo mismo
en nuestro trabajo y en nuestras vidas?

Hace varios años, cuando tenía 32 años,

tomé lo que llamé mi primera jubilación.

Había estado guardando dinero
para mi jubilación

pero también ahorrando dinero
para esta salida provisional,

Dejé mi trabajo como director en
una compañía de asesoramiento comercial,

para irme al extranjero, a construir
mis habilidades, mi experiencia

y seguir varias ideas emprendedoras.

Esto no fue una decisión impulsiva,
sino un plan definitivo.

Mi objetivo era actualizarme, activarme
y reconducir mi vida y mi carrera,

por eso, cuando volviese a trabajar,
tendría un nuevo camino que embarcar.

Imaginé en mi cabeza
un montón de gente que me decía

que lo que estaba haciendo era una locura,

y que estaba arruinando
mi carrera como asesor,

Que si me quedase unos años más,
sería socio, tendría más dinero,

el hueco en mi currículo sería irreparable

y jamás volvería a encontrar otro trabajo.

Por el contrario,

nadie me dijo nada de eso.

En vez de eso, me dijeron:
"Ojalá yo hubiese hecho lo mismo que tú.

Eres afortunado de
no haberte encasillado.

Y de haber aprovechado la oportunidad.

Tienes las habilidades y la experiencia
para hacer cualquier cosa después".

Pero todavía más sorprendente,

es que no me lo dijeron
mis colegas de generación,

sino gente que estaba en sus 60.

Hoy, esta gente está
retrasando su jubilación,

no porque quieran trabajar más,
sino porque no se lo pueden permitir.

Empezaron a reinventarse a los 60,

solo para tener algo
después de la jubilación.

Hay un número en aumento
de gente en este país

que está perdiendo la fe en
el empleo y jubilación tradicional,

a tal punto que hay
una explosión de gente

deseando escapar, 5 de 9.

La compañía de software estima
que en los próximos cuatro años,

el 40 % de nuestra mano de obra
empezará a ser autónoma.

Actualmente, es de ahí
de donde vienen mis ingresos.

Los de la Generación Milenio usamos
la tecnología y la conexión entre personas

para tener mejores oportunidades
de éxito en las economías que necesitamos

y en la flexibilidad que queremos.

Esto está ocurriendo

porque, como trabajaremos más
y viviremos más que nuestros mayores,

pasaremos también por diferentes profesiones,

no solo una que decidamos a los 18 años.

Tendremos diversas facetas
de educación y experiencia

que nos permitan cambiar

de manera que nuestros padres
y abuelos jamás imaginaron.

Las compañías que lideran
su lucha por los jóvenes talentos

están invirtiendo en su gente.

Les están dando la libertad y flexibilidad

para mejorar y crear habilidades

que construya esa cartera
diversa en su carrera.

Algunas maravillosas compañías
incluso les están dando pagas sabáticas,

permitiendo que la gente se actualice
y se reactive en sus profesiones.

Las compañías deben entender

que si ellos no invierten
en el futuro de su gente

el futuro de estas personas
no estará con ellos.

Ahora bien, no estoy sugiriendo que
dejen de ahorrar para su jubilación.

No hagan eso.

Tampoco que abandonen su trabajo
y salten a un avión que va a Tailandia,

aunque es una idea tentadora.

(Risas)

Me refiero a que empiecen a ver su vida

su trabajo y su jubilación
de una manera un poco diferente

y no como una garantía.

La responsabilidad de
actualizarte, reactivarte

y reinventarte, está en Uds. mismos.

No esperen para diversificar
su cartera de vida.

No arriesguen para ser uno más
del casi 70 % de mano de obra

que no está comprometido con su trabajo.

Los años de jubilación no están tan lejos.

Los años de jubilación están aquí mismo.

Gracias.

(Aplausos)