¿Cómo unos pocos científicos transformaron la manera en que pensamos la enfermedad? - Tien Nguyen

Ver la lección completa en: http://ed.ted.com/lessons/how-a-few-scientists-transformed-the-way-we-think-about-disease-tien-nguyen

Durante varios siglos, la gente pensó que las enfermedades eran causadas por nubes errantes de vapor venenoso. Ahora sabemos que esta teoría es bastante ridícula, y que las enfermedades son causadas por bacterias específicas. Pero ¿cómo hemos llegado a esta nueva idea de la teoría de los gérmenes? Tien Nguyen describe el trabajo de varios científicos que desacreditaron una teoría ampliamente aceptada, algo beneficioso para la salud humana.

Este video fue realizado en colaboración con la Oficina de Integridad de la Investigación de EE.UU.: http://ori.hhs.gov.

Lección de Tien Nguyen, animación de Brandon Denmark.

¿Y si te dijera que todas
las enfermedades,

como el resfrío, la gripe,
el estreptococo,

vinieron de nubes errantes
de vapor venenoso?

Quizá pensarías que es absurdo y, no
te preocupes, es completamente erróneo.

Sin embargo, durante siglos se pensó
que eso causaba estas enfermedades.

La llamaban la teoría del miasma,

y todos, desde el público
hasta los médicos, la aceptaban.

Pero en los 1840, en la devastación
por brote de cólera en Londres,

un pequeńo grupo de científicos
se volvió escéptico.

Los primeros microscopios revelaron la
existencia de pequeńos microorganismos,

y ellos propusieron que estos gérmenes
causaban esas enfermedades,

de ahí el nombre de teoría del germen.

Aunque la mayoría de las personas
mantuvo sus supuestos

y se opuso a esta teoría,

sus partidarios se empeńaron en
demostrar que estaban equivocados

y recolectaron datos contundentes.

Lideró la acción un médico
llamado Dr. John Snow.

El Dr. Snow observó que los
pacientes infectados con cólera

tenían vómitos severos y diarrea,

síntomas del intestino en
contraposición a los pulmones,

y pensó que la enfermedad quizá se
transmitía por alimentos o bebidas,

no por el aire.

Tras investigar los brotes anteriores,

se convenció

de que el cólera se extendía por
las fuentes de agua contaminadas.

Luego, a finales del verano de 1854

cuando el cólera irrumpió de
repente en el distrito de Soho,

un barrio de Londres
muy cercano al suyo,

el Dr. Snow le siguió el rastro.

Pidió los registros de los fallecidos,

y en la primera semana, ya se
habían producido 83 muertes.

Él trazó el sitio en el que
había vivido cada difunto

y halló que el 73 % vivía cerca de
la bomba de agua de la calle Broad.

El Dr. Snow recomendó
el cierre de la bomba,

y como sabía lo impopular
que era la teoría del germen,

sugirió que el cólera se esparcía
por un veneno del agua,

en vez de hacerlo por microorganismos,

cuando presentó su caso
a los oficiales del gobierno.

No estaban convencidos,

pero estuvieron de acuerdo en cerrar
la bomba como precaución adicional.

Casi de inmediato, disminuyeron
los nuevos casos.

Alentado por su éxito,

el Dr. Snow estaba decidido a conectar
la bomba de agua contaminada

con la enfermedad.

Encontró la historia de una viuda
que había muerto de cólera

y vivía lejos del Soho,

pero tenía un siervo que le traía agua
de la bomba de la calle Broad a diario

porque a ella le gustaba su gusto.

También descubrió
un albergue de pobres

ubicado en la esquina de
la bomba de la calle Broad

que alojaba cientos de personas
pero solo un puńado se infectó,

lo que el Dr. Snow atribuyó al hecho

de que el albergue tenía
su propio pozo privado.

Finalmente, el Dr. Snow
supo de un infante

que pudo haber sido una de las
primeras víctimas del brote.

Se enteró de que los
pańales sucios del nińo

habían sido arrojados
al pozo negro

contiguo a la bomba de agua
de la calle Broad.

Nuevamente, el Dr. Snow
presentó el caso

pero, incluso entonces, los funcionarios
de la ciudad rechazaron su teoría;

no querían admitir que hubiese desechos
humanos en el agua de Londres,

ni tampoco admitir que estaban
equivocados con la teoría del miasma,

que, después de todo,
tenía cientos de ańos.

No fue sino hasta 1894 que
los esfuerzos del Dr. Snow

fueron reivindicados
por el Dr. Robert Koch,

que aisló la bacteria
causante del cólera.

Koch desarrolló una técnica
para obtener cultivos puros,

y mediante una serie de experimentos,

demostró definitivamente
que una bacteria específica

directamente causaba la enfermedad.

Las principales contribuciones
a la teoría del germen

también vinieron del prolífico
científico Louis Pasteur,

cuyo estudio de microorganismos llevó
al desarrollo de las primeras vacunas.

Desafiando supuestos con
investigación basada en datos,

estos científicos desacreditaron
una teoría ańeja

y provocaron una revolución muy
beneficiosa para la salud pública.

Pero todo esto plantea la cuestión

de cuáles son las creencias
científicas generalizadas hoy

que nuestra descendencia
hallará ridículas.

Y como te diría cualquier científico,

una pregunta es un lugar
excelente para comenzar.