Pon objetivos en tu día | Virginia Hevia | TEDxYouth@Gijón

Esta charla es de un evento TEDx, organizado de manera independiente a las conferencias TED.

Plantearse pequeños objetivos realizables mejorará tu vida. Escribirlos en una libreta y nunca tener miedo a fracasar.

Nacida en 1999, cursa 4º de la ESO en el Corazón de María. Se define como gran amante de los libros, el deporte y la expresión en todas sus formas, comenzó a escribir de pequeña y a lo largo de los últimos años se ha dado cuenta de muchas cosas relacionadas con conseguir lo que te propones y ser la dueña de tu vida.

Te levantas, vas al cole,

haces los deberes,
haces deporte, y te acuestas.

Te levantas, vas al cole,

haces los deberes,
haces deporte, y te acuestas.

Te levantas, vas al cole,

haces los deberes,
haces deporte, y te acuestas.

Te levantas, vas al cole...

Esto tiene un nombre.

Se llama rutina.

Y la mayoría de nosotros
vivimos sumidos en ella

sin darnos cuenta de lo que
está pasando a nuestro alrededor.

Porque si yo ahora mismo
os preguntara:

¿Qué sentido tiene tu vida?

¿Por qué o por quién vives?

¿Sabríais responderme?

(Murmullo)

Hace no mucho tiempo
me regalaron un libro.

Ese libro trataba

de cómo alcanzar tus metas,
de cómo conseguir tus objetivos.

Pero a medida que lo iba leyendo
me iba dando cuenta

de que yo no tenía metas,
no tenía objetivos.

Y eso contribuía a que
mi vida no tuviera sentido.

Habrá quien diga que vive por el verano,

que vive por pasárselo bien
con sus amigos, por ponerse moreno.

Vale, puede ser.

Pero el verano, como viene se acabará.

Y así año tras año.
Es inevitable.

Empezará el curso; estudiarás, o no.

Acabará el curso y empezará el verano.

Empezará el curso, estudiarás, o no.

Acabará el curso y empezará el verano.

Volviéndonos a meter
en la espiral de la rutina.

Y podréis decir: "Bueno, sí,

hay gente que vive muy feliz
con una rutina".

Sí, hay gente que vive muy feliz
toda su vida en una rutina.

Pero solo si te conformas.

Solo si te conformas
con tener una vida lineal,

una vida sin emoción.

Si te conformas con ser
igual que los demás.

Y no destacar.

¿Y tú crees que Albert Einstein,

o, por ejemplo, Rafa Nadal

se conformaron con ser buenos?

No, no descansaron hasta ser los mejores.

Porque para triunfar hay que luchar.

Entonces volviendo al punto de partida.

Vale, tenemos un problema muy grave,

y es que muchos de nosotros
vivimos sumidos en una rutina.

No nos damos cuenta
de lo que está pasando.

Y nuestras vidas puede que
no tengan mucho sentido a veces.

Somos como hojas guiadas por el viento.

Y no queremos eso.

Nosotros queremos ser
el viento que guía las hojas

dando el rumbo a nuestra vida.

Así que, todo problema tiene solución.

Y este no iba a ser una excepción.
Yo te la voy a dar.

La solución al problema
de vivir en la rutina

y de no tener una vida con mucho
sentido es marcarse objetivos.

Fácil, ¿no?

Bueno, lo es.

Lo primero: tienes que marcarte
objetivos accesibles,

que puedas realizar en tu día a día
y que estén al alcance de tu mano.

Y así, poco a poco verás
cómo tu vida va mejorando.

Y bueno, yo ahora os voy a dar

dos pautas a la hora
de marcaros objetivos.

La primera es que no vale
solo con pensarlos,

tenéis que escribirlos,

tenéis que escribirlos en una libreta,
en una libreta de objetivos.

Y cada noche antes de iros a dormir
leer vuestra lista de objetivos

y valorar si en ese día

habéis hecho todo lo que estaba
al alcance de vuestra mano

para conseguirlo.

Lo segundo que debéis hacer
a la hora de marcaros objetivos

es nunca, nunca, jamás
tener miedo a fracasar.

Porque vale más equivocarte haciendo algo
que arrepentirte por no haberlo hecho.

Os voy a contar una historia.

Una historia que me ocurrió
a mí este verano.

Este verano estaba yo en la playa
sola porque mis padres ya se habían ido.

Y bueno, estaba atardeciendo
y yo me iba a ir también en breve.

Y, de repente, vi a unos chicos que
se estaban tirando por unas rocas.

Y dije: "Parece que se lo están
pasando bastante bien".

Entonces, por una parte,
mi cabeza empezó a pensar:

"¿Para qué te vas a tirar?
¿Para mojarte, para hacerte daño?

Nadie va a valorar
si eres valiente o cobarde.

No te van a volver a ver
en la vida. No te tires".

Pero por otra parte, otra parte
de mí, de mi cabeza estaba pensando:

no volverás a tener esta oportunidad,
puede que luego, en el invierno,

cuando estés estudiando con frío
te arrepientas y digas:

"¿Por qué no me tiraría por aquella
roca que parecía tan divertido?"

Entonces, en este conflicto interno,

cogí mi toalla, la doblé,
la tiré a un lado,

di un paso al frente, inspiré...

y mi tiré.

Vale, sí, os puedo asegurar
que me dolió bastante

y que la sensación fue
de todo menos agradable.

Pero todo ello quedó mitigado
por la satisfacción personal,

que sentí al haber hecho algo de lo
que en un principio no me creía capaz.

Y habrá quién pueda decir:

"¿Y te sientes orgullosa
por tirarte de una roca?"

Yo me tiro por rocas todos los veranos
y no lo ando contando en una charla.

(Risas)

Vale, sí, tienes razón, tú te tiras
por rocas todos los veranos

y debes estar orgullosa también de ello,

pero yo me siento orgullosa
porque fue mi logro,

porque yo no me creía capaz y lo hice.

Y cada uno tiene que encontrar el suyo.

Entonces, yo ahora, cuando
no me veo capaz de hacer algo,

cuando creo que no voy a poder
con alguna situación,

me acuerdo de la chica miedosa
que se tiró por una roca.

Y a partir de ahora
me podría acordar también

de la chica que hace un par de años
en clase se quedaba toda la hora

sin decir nada.

Y que ahora está hablando delante
de un montón de personas.

Entonces, como conclusión final
a todo esto que os acabo de contar,

vamos a poner unos puntos.

Lo primero: no dejes
que la rutina te absorba.

[Lo segundo:] márcate objetivos.

[Lo tercero:] lucha por ellos.

[Lo cuarto:] equivócate
y vuelve a empezar.

[Lo quinto:] y recuerda, sobre todo,

que nunca es tarde para
hacer aquello que quieres.

Porque los valientes
construyen la historia.

Gracias.

(Aplausos)