Corrupción, riqueza y belleza: La historia de la góndola veneciana - Laura Morelli

Para ver la lección completa: http://ed.ted.com/lessons/corruption-wealth-and-beauty-the-history-of-the-venetian-gondola-laura-morelli

Es difícil imaginar Venecia sin las curiosas góndolas en forma de banana que se deslizan por los canales. ¿Cómo llegaron estos barcos a ser el transporte emblemático de Venecia? Laura Morelli detalla la historia de la góndola, explica por qué se necesitaban estos barcos, cómo se llevaba a cabo el laborioso proceso de fabricación y por qué han comenzado lentamente a desaparecer de los canales en su día repletos.

Lección de Laura Morelli, animación de Andrew Foerster.

Si digo, "Venecia", ¿te imaginas a ti
mismo deslizándose por el Gran Canal,

acompañado por un gondolero?

No hay duda de que la góndola
es un símbolo de Venecia, Italia,

pero ¿cómo este curioso bote en forma de
banana negra logra su aspecto distintivo?

Los orígenes de la góndola de Venecia
se han perdido en la historia,

pero por el 1500, unas 10 000 góndolas
portaban dignatarios, comerciantes y bienes

a través de los canales de la ciudad.

De hecho, Venecia estaba repleta de
diferentes tipos de embarcaciones,

de balsas utilitarias hasta la propia
barcaza dorada ostentosa del Dux.

Al igual que un sistema de taxis de hoy,
las góndolas se arrendaban a barqueros

que hacían rondas por las estaciones
de ferry de la ciudad.

Los pasajeros pagaban una tarifa para ser
llevados de un lado a otro del Gran Canal,

así como a otros puntos de la ciudad.

Pero los gondoleros pronto
tuvieron mala reputación.

Los documentos históricos describen
numerosas infracciones de los barqueros,

incluyendo maldiciones, juegos de azar,
extorsiones a pasajeros...

incluso actos ocasionales de violencia.

Para reducir al mínimo la
imprevisibilidad de los viajes,

los ciudadanos venecianos que podían
se compraron sus propias góndolas,

como un celebridad hoy puede utilizar
un vehículo particular con conductor.

Estos venecianos ricos contrataron dos
gondoleros para que les transportaran

por la ciudad y cuidaran sus barcos.

Las góndolas se convirtieron en un
símbolo de estatus, como un auto caro,

con accesorios personalizados,
tallados y adornos dorados,

y telas de temporada,
como la seda y el terciopelo.

Sin embargo, la mayoría de
las góndolas hoy son negras

debido a que en 1562,
las autoridades venecianas decretaron

que todas, menos las góndolas
ceremoniales, se pintarían de negro

a fin de evitar
extravagancias pecaminosas.

Al parecer, las autoridades venecianas
no querían "prostitución en los paseos".

Aún así, algunos venecianos
ricos prefirieron pagar multas

con el fin de mantener
sus góndolas ornamentales,

un bajo precio
para mantener las apariencias.

El aspecto distintivo de la góndola
se desarrolló durante muchos siglos.

Cada góndola se construía
en un astillero familiar llamado 'squero'.

De abuelos y padres, los hijos
aprendieron a seleccionar y adornar

piezas de madera de haya, cerezo,
olmo, abeto, caoba, roble y nogal.

Los fabricantes comenzaban
con una plantilla de madera

que habían claveteado en el suelo del
taller las generaciones anteriores.

A esta forma básica,
pegaban la proa y la popa,

luego formaban los tablones
longitudinales y las nervaduras del marco

del barco diseñado para deslizarse a
poca profundidad por canales estrechos.

Una góndola no tiene
líneas o bordes rectos.

Su perfil familiar se logra a través de
un impresionante proceso de fuego y agua

que implicaba arquear los tablones
con antorchas hechas de cañas abrasadas.

Sin embargo, la mayoría de las 500 horas
necesarias en su construcción

se invertían en las etapas finales:

preparar superficies y aplicar capas
sucesivas de barniz resistente al agua.

El barniz era una receta familiar, tan
celosamente guardada como la del risotto

o una salsa casera.

Pero, incluso con la madera terminada,
la góndola todavía no se había completado.

Los artesanos especializados daban
a sus colegas gondoleros

una cubiertas elaboradas para
compartimentos de pasajeros,

de tapicería y adornos de acero y latón.

Los fabricantes del remo se volvieron
socios de los fabricantes de góndolas.

El remo veneciano o "forcola" comenzó
siendo un simple tenedor de madera,

pero evolucionó a una herramienta de
precisión que permitía al gondolero

guiar el remo en muchas posiciones.

A finales de 1800,

los fabricantes comenzaron a hacer la
parte izquierda de la góndola más ancha

como un contrapeso a la fuerza creada
por un solo gondolero.

Esta modificación permitió a los remeros
timonear solo desde el lado derecho,

y sin levantar el remo del agua.

Si bien estas modificaciones
mejoraron los viajes en góndola,

no alcanzaron para mantener
el ritmo de los barcos motorizados.

Hoy en día, solo unas 400 góndolas se
deslizan por los canales de Venecia,

y cada año, menos góndolas auténticas
se accionan de forma manual.

Pero en las calles, las señales tienen
palabras en dialecto veneciano de

los astilleros antiguos, fabricantes de
remos y estaciones de ferry,

manteniendo la memoria de oficios
de construcción de barcos

que una vez mantuvieron
la vida en la más serena

república deslizándose
a un ritmo constante.