A veces es mejor ceder el asiento del piloto | Baba Shiv | TEDxStanford

A lo largo de los años, la investigación ha demostrado un hecho contradictorio sobre la naturaleza humana: que, a veces, tener demasiadas opciones nos hace ser menos felices. Esto incluso puede ser cierto cuando se trata de un tratamiento médico. Baba Shiv comparte un estudio fascinante que explica por qué la opción abre la puerta a la duda y sugiere que ceder el control, especialmente en decisiones de vida o muerte, es lo mejor que podemos hacer.

Esta charla es de un evento TEDx, organizado de manera independiente a las conferencias TED.

Quiero empezar con una anécdota sombría.

En 2007, hace cinco años,

a mi mujer le diagnosticaron
cáncer de mama.

Estadio IIB.

Ahora, mirando atrás,
lo más horrible de aquella experiencia,

no fueron solo las visitas al hospital

que para mi mujer fueron
muy difíciles, comprensiblemente.

Tampoco lo fue la conmoción
inicial cuando nos enteramos

de que tenía cáncer de mama,
con tan solo 39 años

y sin ningún familiar
que haya padecido cáncer.

Lo más horrible y
agobiante de todo aquello

fue que tomábamos decisiones,
una detrás de otra,

que se nos estaban imponiendo.

¿Se debería hacer
una mastectomía o una lumpectomía?

¿Se debería hacer
una operación más agresiva

dado que se encontraba
en estadio IIB?

¿Con todos sus efectos secundarios?

¿O se debería hacer
una operación menos agresiva?

Y estas eran las preguntas
que nos presionaban

por parte de los médicos.

A lo mejor podrían preguntar

¿por qué los médicos
estaban haciendo esto?

Pues, la respuesta más simple sería

que los médicos hacen esto
porque quieren protegerse legalmente.

Yo creo que eso es demasiado simple.

Son médicos con buenas intenciones,

algunos se han convertido
en buenos amigos.

A lo mejor solo estaban
siguiendo los procedimientos

como siempre se ha hecho,

del proverbio que dice
cuando hay que tomar decisiones,

sobre todo decisiones importantes,

es mejor tener tanto
la responsabilidad como el control,

es mejor estar en el asiento del piloto.

Y nosotros, por supuesto,
estábamos en el asiento del piloto

tomando estas decisiones
y permitan que les diga

que si alguno de Uds.
hubiera pasado por eso

sabría cómo de agobiante y horrible es.

Lo que me llevó a reflexionar.

Me pregunté si había alguna validez

en este proverbio de cuando
hay que tomar decisiones

es mejor estar en el asiento del piloto,

tener la responsabilidad,
tener el control.

O si en algunos momentos es mejor

ceder el asiento del piloto
para que conduzca otro.

Por ejemplo, un asesor financiero

o un médico en el que confiamos, etc.

Y dado que investigo sobre
cómo toman decisiones los humanos,

me propusé llevar a cabo algunos estudios

para encontrar algunas respuestas.

Y les compartiré algunos
de estos estudios hoy.

Imaginen que todos Uds.
participan en este estudio.

Quiero decirles que en el estudio

van a beber una taza de té.

Si se preguntan por qué,

se los diré en unos segundos.

Van a resolver una serie de acertijos,

de los cuales les enseñaré
unos ejemplos en un momento.

Y cuantos más acertijos resuelvan,

más oportunidades tendrán
de ganar unos premios.

Ahora bien, ¿por qué tienen que beber té?

¿Por qué? Porque tiene mucho sentido.

Para resolver estos acertijos
de manera más efectiva,

si lo piensan, su mente necesita
estar en dos estados a la vez ¿cierto?

Necesita estar en alerta

y la cafeína es muy buena para esto.

Y, a la vez, necesita estar tranquila.

No alterada, sino tranquila y
para eso la manzanilla es muy buena.

Y ahora viene el diseño intra-sujeto,

el diseño AB, el test AB.

Así que los voy a asignar

aleatoriamente a uno de dos grupos.

Imaginen entonces
que hay una línea aquí.

Así que Uds. serán el grupo A

y Uds. el grupo B.

Ahora, a Uds., lo que voy a hacer

es mostrarles estos dos tés

y les pediré que elijan su té.

Así que pueden elegir el té que quieran.

Pueden decidir
cuál es su estado mental:

pueden elegir té con cafeína,

yo elegiré el de manzanilla.

Así que tendrán la responsabilidad

tendrán el control,
estarán en el asiento del piloto.

A Uds. les voy a enseñar estos dos tés

pero no pueden elegir.

Les daré uno de estos dos tés

y recuerden que yo elegiré
al azar por Uds.

Y lo saben.

Así que, si lo reflexionan,
este es un caso extremo

porque en la vida real,

cuando están en el asiento del pasajero,

a menudo el conductor será alguien
en quien confían, como un experto, etc.

Así que este es un caso extremo.

Ahora, van a beber el té.

Imaginen que están tomando el té,

esperaremos a que se lo terminen.

Dejaremos pasar 5 minutos para
que los ingredientes hagan efecto.

Ahora tendrán 30 minutos
para resolver 15 acertijos.

Este es un ejemplo del acertijo
que van a resolver.

¿Alguien del público tiene la respuesta?

Público: Púlpito
Baba Shiv: ¡Guau!

Bien, está bien.

Lo que hacemos si los tuviéramos,
quien tuviera la respuesta

como participante, habríamos calibrado
el nivel de dificultad

de los acertijos según su pericia.

Porque queremos
que los acertijos sean difíciles.

Estos acertijos tienen trampa
porque su instinto les dice "tulipán"

y luego tienen que cambiar la respuesta.

¿Cierto? Bueno, estos acertijos
han sido calibrados según su pericia

porque queremos que sea difícil
y les diré por qué en seguida.

Ahora bien, este es otro ejemplo.

¿Alguien lo sabe? Es mucho más difícil.

Público: Embark
BS: Sí, ¡Guau!, bien.

Una vez más, es difícil.

Pensarron en "kambar" y
luego cambiaríaron a "maker"

y así hasta dar con la respuesta.

Bien, pues tienen 30 minutos
para resolver estos 15 acertijos.

Ahora, la pregunta que estamos haciendo

con respecto al resultado,

con relación al número
de acertijos resueltos,

¿si estuvieran en el asiento del piloto

resolverían más acertijos

porque tienen el control

y han elegido el té que han querido?

O, ¿mejorarían

con respecto al número
de acertijos resueltos?

Y sistemáticamente, lo que mostraremos

a través de una serie de estudios

es que si Uds., los pasajeros,

aunque alguien haya elegido
al azar el té por Uds.

terminarán resolviendo
más acertijos que Uds. los conductores.

También podemos observar otra cosa.

Y es que, Uds., no solo están
resolviendo menos acertijos

sino que están poniendo
menos empeño en la tarea.

Menos esfuerzo,
son menos persistentes y demás.

¿Cómo lo sabemos?

Tenemos dos mediciones objetivas.

Una es ¿cuánto tiempo tardan

en intentar resolver estos acertijos?

Uds. tardarán menos tiempo que ellos.

La segunda es que tienen
30 minutos para resolverlos,

¿utilizarán los 30 minutos
o se darán por vencidos

antes de que pasen los 30 minutos?

Uds. probablemente se rendirán
antes de que pasen los 30 minutos.

Así que, ponen menos empeño
y, por ello, el resultado es

que resuelven menos acertijos.

Ahora, eso nos lleva a preguntar
¿por qué pasa esto?

Y ¿en qué situaciones veríamos
este patrón de resultados

en el que el pasajero lo hará mejor
y tendrá mejores resultados

en comparación con el piloto?

Todo se relaciona con lo que enfrentan
y a lo que llamo "INCA"

Es un acrónimo que representa

el tipo de retroalimentación que reciben
después de haber tomado una decisión.

Si lo piensan, esta tarea
de acertijos en concreto

también se hace a la hora
de invertir en la bolsa,

algo muy inestable,
podría ser la situación médica...

la retroalimentación aquí es inmediata.

Saben cual es la retroalimentación
sea que resuelvan el acertijo o no.

¿Cierto? En segundo lugar es negativo.

Recuerden que la suerte
está en su contra

respecto al nivel de
dificultad de estos acertijos.

Y esto puede pasar en
el ámbito de la medicina.

Por ejemplo, justo
al inicio del tratamiento

todo es negativo, la retroalimentación
igual, antes de que sea positivo, ¿no?

Esto también puede pasar
en la bolsa, es inestable,

la retroalimentación también
es negativa e inmediata

y en cualquier caso es concreta.

No es ambiguo, saben
si han resuelto los acertijos o no.

Ahora, lo que añado es
que aparte de esta inmediatez,

negatividad, precisión,

experimentan un sentimiento de mandato.

Fueron los responsables de su decisión.

Así que, ¿qué hacen?

Se enfocan en la opción ineludible.

Les dicen: ¿saben qué?
Tendrían que haber elegido el otro té.

(Risas)

Esto pone su decisión en duda,

reduce la confianza
que depositan en la decisión,

reduce la confianza
que depositan en desempeñarla,

desempeñarla en el sentido
de resolver los acertijos.

Y al poner menos empeño en la tarea,
se resuelven menos acertijos

y obtienen resultados
peores que los demás.

Y esto puede ocurrir en el ámbito
de la medicina si lo piensan.

¿No? Un paciente en el asiento
del piloto, por ejemplo.

Menos empeño,
lo que significa estar

en menor forma física, menos activo
para recuperarse antes

y esto es justo lo que nos recomiendan.

Probablemente no lo harían.

Y por ello, hay veces
cuando se enfrentan a INCA,

cuando la retroalimentación
va a ser inmediata, negativa,

precisa y tienen
el sentimiento de mandato,

donde son mejores al tomar
el asiento del pasajero.

y que conduzca otro.

Ahora bien, empecé
con una anécdota sombría

y quiero acabar con
una anécdota alegre.

Ya han pasado cinco años,
un poco más de cinco años,

y la buena noticia, gracias a Dios,

es que el cáncer está en remisión.

Así que hay un final feliz,

pero algo que no dije

es que al inicio de su tratamiento,

mi mujer y yo decidimos que
tomaríamos el asiento del pasajero.

Y eso marcó una gran diferencia

en relación con la paz interior
que vino con ello,

que hizo que nos centrásemos
en su recuperación.

Dejamos que los médicos
tomasen todas las decisiones,

que fueran los pilotos.

Gracias.

(Aplausos)