Chris Anderson: "El derecho
de los ciudadanos,
el futuro de Internet".
Quiero darle la bienvenida
al escenario de TED
al hombre detrás
de esas revelaciones:
Ed Snowden.
(Aplausos)
Ed está en algún lugar remoto, en Rusia,
controlando este bot desde su laptop,
así que puede ver lo que ve el bot.
Ed, bienvenido a TED.
Por cierto, ¿qué estás viendo?
Edward Snowden: Ja, los veo a todos.
Es sorprendente.
(Risas)
CA: Ed, tengo algunas
preguntas para hacerte.
Te han calificado
de muchas maneras
en los últimos meses.
Te llamaron soplón, traidor,
héroe.
¿Con qué palabras te describirías?
ES: Sabes, los que se meten
en este debate
se preocupan por mí,
por mi personalidad
y cómo describirme.
Pero cuando lo pienso,
esa no es la cuestión de la
que deberíamos preocuparnos.
Quién soy realmente no importa.
Si soy la peor persona del mundo,
puedes odiarme y pasar a otra cosa.
Lo que de verdad importa acá
son los problemas.
Lo que en verdad importa es la clase
de gobierno que queremos,
el tipo de Internet que queremos,
el tipo de relación
entre las personas
y las sociedades.
Hacia allí quiero
que vaya el debate
y lo vemos cada vez más
con el tiempo.
Si tuviera que describirme,
no usaría "héroe",
ni "patriota", ni "traidor".
Diría que soy un
ciudadano estadounidense
como cualquier otro.
CA: Para dar un poco de contexto
a los que no conocen la historia...
(Aplausos)
Para esta época hace un año,
estabas en Hawái
trabajando como consultor
para la NSA.
Como administrador
de sistemas, tenías acceso
a sus sistemas
y empezaste a revelar ciertos
documentos clasificados
a algunos periodistas
elegidos cuidadosamente,
lo que desembocó en las
revelaciones de junio.
¿Qué te impulsó a hacer eso?
ES: Bueno,
cuando estaba en Hawái,
y en los años anteriores, cuando trabajaba
para la comunidad de inteligencia,
vi muchas cosas que me preocuparon.
Hacemos muchas cosas buenas
en la comunidad de inteligencia,
cosas que hay que hacer,
cosas que nos ayudan a todos.
Pero también hay cosas
que van muy lejos.
Hay cosas que no deberían hacerse
y decisiones que se tomaban en secreto
sin el conocimiento del público,
sin el consentimiento del público
y sin siquiera el conocimiento
de nuestros representantes
en el gobierno sobre
estos programas.
Cuando empecé a luchar
con estos problemas,
pensé para mí,
¿cómo puedo hacer esto de
la manera más responsable,
que maximice los beneficios
para la gente
y minimice los riesgos?
Y de todas las soluciones
que se me ocurrieron,
salvo ir al Congreso,
porque no había leyes,
no había protecciones legales
para un empleado privado,
un contratista de inteligencia como yo,
había un riesgo de que me enterraran
junto con la información
y que la gente nunca se enterara.
Pero la Primera Enmienda
de la Constitución de EE.UU.
nos garantiza la libertad
de prensa por una razón
y es permitirnos
una prensa antagonista
para desafiar al gobierno,
pero también para trabajar
junto al gobierno,
para tener un diálogo
y un debate sobre cómo podemos
informar al público sobre
los asuntos de vital importancia
sin poner en riesgo
la seguridad nacional.
Y trabajando con periodistas,
dándoles toda mi información
de vuelta al pueblo estadounidense,
en vez de confiarme y tomar
las decisiones sobre la publicación,
hemos tenido un jugoso debate
con una gran inversión
por parte del gobierno
que creo que trajo
un beneficio para todos.
Y los riesgos de amenaza,
los riesgos esgrimidos
por el gobierno
nunca se materializaron.
Nunca vimos prueba alguna
de la manifestación de
un daño concreto
y, por eso,
estoy conforme con
las decisiones que tomé.
CA: Le mostraré a la audiencia
un par de ejemplos
de lo que revelaste.
Tenemos algunas diapositivas y Ed,
no sé si puedes ver,
las diapositivas están acá.
Esta es sobre el programa PRISM.
Quizá puedas contarle a la audiencia
qué fue lo que revelaste.
ES: La mejor manera de entender PRISM,
porque ha habido cierta controversia,
es decir lo qué no es PRISM.
Gran parte del debate en EE.UU.
fue sobre los metadatos.
Dicen que son solo metadatos,
solo metadatos
y hablan de un
recurso legal específico
que es la Sección 215
de la Ley Patriótica,
que permite pinchar
teléfonos sin garantías,
supervisión masiva de las llamadas
de todo el país, cosas así...
con quién hablas,
cuándo les hablas,
a dónde viajaste.
Esos son metadatos.
En PRISM se trata del contenido.
Es un programa por el cual
el gobierno podría
obligar a las empresas en EE.UU.,
representarlas para que
hagan el trabajo sucio para la NSA.
Y aunque algunas esas
empresas se resistieron,
aunque algunas de ellas...
creo que Yahoo fue una...
los llevaron a la Justicia,
y todos perdieron,
porque nunca se juzgó
en audiencia pública.
Solo lo hicieron en cortes secretas.
Y algo que vimos,
algo sobre el programa PRISM
que me parece muy preocupante,
hubo una instancia de discusión
en el gobierno de EE.UU.
y dicen que 15 jueces federales
revisaron el programa
y dijeron que era legal,
pero lo que no dicen
es que son jueces secretos
en una corte secreta
que se basaron en una
interpretación secreta de la ley
que consideraron 34 000 pedidos
de órdenes judiciales
a lo largo de 33 años,
y en 33 años solamente
rechazaron 11 pedidos del gobierno.
Estas no son las personas
que queremos que decidan
cuál debería ser el rol del
empresariado estadounidense
en una Internet libre y gratuita.
CA: Esta dispositiva
que estamos mostrando
muestra las fechas en que
distintas empresas
de tecnología, de Internet
habrían entrado al programa
y cuando empezó la recolección
de información por parte de ellos.
Ahora, han negado haber
colaborado con la NSA.
¿Cómo recolectó esa información la NSA?
ES: Las propias diapositivas de la NSA
se refieren a eso como acceso directo.
Lo que eso significa
para un analista de la NSA,
alguien como yo que trabajaba
como analista de inteligencia
localizando hackers
informáticos chinos,
y cosas como esas, en Hawái,
es que el origen de esa información
viene directamente desde los servidores.
No quiere decir
que haya un grupo de
representantes de empresas
sentados en una
habitación con la NSA
haciendo tratos oscuros y secretos
sobre cómo dar esa información.
Cada empresa lo maneja
forma distinta.
Algunas son responsables.
Algunas son menos responsables.
La cuestión de fondo es,
cuando hablamos
de cómo se entrega la información,
es que viene de las propias empresas.
No se roba de las líneas.
Y hay algo importante que recordar:
a pesar de que las empresas presionaron,
que demandaron,
hagámoslo mediante un proceso legal,
hagamos esto
con algún tipo de
visto bueno legal,
alguna fundamentación para manejar
los datos de los usuarios,
vimos noticias en el Washington Post
el año pasado
que no fueron tan bien cubiertas
como lo del PRISM
que dicen que la NSA se metió
en los centros de
comunicación de datos
entre Google y sí mismo
y Yahoo y sí mismo.
Por eso aún con estas empresas
que están cooperando
en forma forzada
pero de manera legal
con la NSA,
la NSA no está satisfecha
y por eso necesitamos
que nuestras empresas
trabajen arduamente
para garantizar que
van a representar
los intereses del usuario y abogar
por los derechos de los usuarios.
Creo que el año pasado
vimos a las empresas
que están nombradas
en las diapositivas de PRISM
hacer grandes esfuerzos en ese sentido,
y las animo a que lo sigan haciendo.
CA: ¿Qué más pueden hacer?
ES: Lo más que puede hacer
una empresa de Internet
en EE.UU. hoy, en este momento,
sin consultar con los abogados,
para proteger los derechos de
los usuarios en todo el mundo,
es habilitar un encriptado web SSL
en cada página que uno visite.
Esto importa hoy por hoy porque
si buscas una copia
de "1984" en Amazon.com,
la NSA puede ver un registro de eso,
el servicio de inteligencia ruso puede verlo,
los chinos pueden verlo,
los franceses, los alemanes,
el servicio de Andorra también.
Todos lo pueden ver porque
no está encriptado.
Amazon.com es la biblioteca mundial,
pero no solo no soportan
encriptación por omisión,
sino que uno no puede
elegir usar encriptación
cuando navega los libros.
Esto es algo que debemos cambiar,
no solo para Amazon.com,
no quiero destacarlos,
pero es un buen ejemplo.
Todas las empresas
tienen que pasar
al hábito de la navegación
encriptada por omisión
para todos los usuarios
que no tomaron ninguna acción
o no eligieron ningún método
especial por su cuenta.
Eso aumentará
la privacidad y los derechos
de los que gozan las personas
en todo el mundo.
CA: Ed, acompáñame
a esta parte del escenario.
Quiero mostrarte la próxima
diapositiva. (Aplausos)
Este es un programa llamado
Boundless Informant [Informante ilimitado]
¿Qué es?
ES: Bueno, tengo que
darle crédito a la NSA
por ponerle el nombre correcto.
Es uno de mis nombres en clave
de la NSA preferidos.
Boundless Informant
es un programa que la NSA
le ocultó al gobierno.
El Congreso le había
consultado a la NSA
si podían
dar un estimado aproximado
de la cantidad de
comunicaciones en EE.UU.
que eran interceptadas.
Dijeron que no, que no
llevan esas estadísticas
y que no pueden hacerlo.
No podemos decirte
cuántas comunicaciones
interceptamos en el mundo,
porque decírtelo sería
invadir tu privacidad.
Realmente aprecio el gesto,
pero la realidad
al mirar la diapositiva es
que no solo tienen la capacidad,
sino que ya existe esa capacidad.
Ya está en marcha.
La NSA tiene su propia
información interna
que registra ambos lados
de la comunicación,
y si dice
esta comunicación vino de EE.UU.,
pueden decirle al Congreso
cuántas de esas comunicaciones
tienen hoy, en este momento.
Y Boundless Informant nos dice
que hay más comunicaciones
interceptadas
en EE.UU. entre estadounidenses
que las que hay en Rusia entre rusos.
No creo que ese sea
el objetivo a seguir
para una agencia de inteligencia.
CA: Ed, hay una noticia
en el Washington Post,
también proveniente
de tu información.
El título dice:
"La NSA violó las reglas de privacidad
miles de veces por año".
Cuéntanos sobre eso.
ES: También escuchamos un testimonio
en el Congreso el año pasado,
y fue increíble
para alguien como yo
que vino de la NSA,
que vio los documentos internos,
y sabe lo que contienen,
ver a los funcionarios
testificar bajo juramento
que no hubo abusos,
que no hubo violaciones
de las reglas de la NSA,
cuando sabíamos que
salía esta historia.
Pero lo más interesante de esto,
del hecho de que la NSA violó
sus propias reglas,
sus propias leyes
miles de veces en un año,
incluido un hecho en sí mismo,
un hecho en esos 2776,
que afectó a más de 3000 personas.
En otro evento, interceptaron
todas las llamadas de
Washington DC, por accidente.
Lo increíble de eso,
este informe, que no
recibió mucha atención,
es que no solo hubo 2776 abusos,
la presidenta del Comité
de Inteligencia del Senado,
Dianne Feinstein, no había
visto este informe
hasta que el Washington Post
la contactó
para pedirle su opinión.
Y después pidió una copia a la NSA
y la recibió
pero nunca lo había visto antes.
¿Qué nos dice eso sobre
el estado de descuido
en la inteligencia estadounidense
cuando la presidenta del
Comité de Inteligencia del Senado
no tiene idea de que se están
quebrantando las normas
miles de veces cada año?
CA: Ed, una respuesta para todo
este debate es:
¿Por qué nos debería importar
toda esta vigilancia?
O sea, si no hiciste nada malo,
no hay de qué preocuparse.
¿Qué tiene de malo ese punto
de vista?
ES: Para empezar,
estás entregando tus derechos.
Estás diciendo, mira,
creo que no los necesito,
y voy a confiar, sabes,
vamos a deshacernos
de ellos, no importa,
estos tipos van
a hacer lo correcto.
Tus derechos sí importan
porque nunca sabes
cuándo puedes necesitarlos.
Más allá de eso, es parte
de nuestra identidad cultural,
no solo en EE.UU.,
sino en las
sociedades occidentales,
y en las sociedades
democráticas del mundo.
Las personas tienen que
poder levantar el teléfono,
llamar a sus familiares,
mandar mensajes de texto
a sus seres queridos,
comprar un libro en línea,
viajar en tren,
comprar un viaje de avión,
sin preocuparse cómo estos hechos
serán evaluados por un agente
del gobierno,
quizá ni siquiera tu gobierno
en el futuro,
cómo van a malinterpretar
y cuáles pensaron que
eran tus intenciones.
Tenemos el derecho a la privacidad.
Necesitamos garantías que se
basen en una causa probable
o algún tipo de
sospecha individualizada
porque reconocemos
que confiarle a alguien,
a cualquier autoridad gubernamental,
la totalidad de las
comunicaciones humanas
en forma secreta y sin supervisión
es una tentación demasiado grande
para ser ignorada.
CA: Algunas personas están furiosas
con lo que hiciste.
Oí una frase de Dick Cheney
que dijo que Julian Assange
era una picadura de pulga,
Edward Snowden es el león
que decapitó al perro.
Dice que cometiste
uno de los mayores actos
de traición
en la historia de EE.UU.
¿Qué les dirías a las personas
que piensan así?
ES: Dick Cheney es especial.
(Risas)
(Aplausos)
Gracias.
(Risas)
Es increíble porque cuando
Julian Assange estaba haciendo
su mejor trabajo,
Dick Cheney estaba diciendo
que iba a terminar con los
gobiernos del mundo,
los cielos arderían en llamas
y los mares entrarían en ebullición,
y ahora dice que es
una picadura de pulga.
Deberíamos sospechar
del mismo tipo
de declaraciones exageradas sobre
el daño a la seguridad nacional
por parte de estos funcionarios.
Pero pensemos que
la gente se lo cree.
Yo diría que tienen una
concepción muy cerrada de
la seguridad nacional.
Las declaraciones de gente
como Dick Cheney
no mantienen seguro al país.
El interés del público
no siempre es el mismo
que el interés nacional.
Ir a la guerra contra personas
que no son nuestro enemigo
en lugares que no son una amenaza
no nos hace más seguros,
y eso es válido en Irak
o en Internet.
Internet no es el enemigo.
Nuestra economía no es el enemigo.
Los negocios estadounidenses, chinos,
y cualquier otra empresa
son parte de nuestra sociedad.
Son parte de nuestro mundo
interconectado.
Hay lazos de fraternidad que nos unen,
y si se destruyen estos lazos
socavando los estándares, la seguridad,
la forma de conducta,
los países y los ciudadanos del mundo
esperan que nos atengamos a ellos.
CA: Pero se dice que robaste
1,7 millones de documentos.
Parece que solo algunos miles
fueron compartidos con
periodistas hasta ahora.
¿Habrá más revelaciones?
ES: Seguro que hay más
revelaciones por venir.
Creo que sin dudas
todavía están por hacerse
algunos de los informes
más importantes.
CA: Sígueme, porque
quiero preguntarte
sobre esta revelación
en particular.
Mira esto.
Es una historia que para
muchos tecnólogos en la sala
es lo más revelador
que escucharon en los últimos meses.
Es sobre el programa "Bullrun"
¿De qué se trata?
ES: Bullrun, y acá también
tenemos que agradecer
a la NSA por su sinceridad,
lleva el nombre de una batalla
de la Guerra Civil.
La contraparte británica
se llama Edgehill,
una batalla de la guerra civil
del Reino Unido.
La razón por la que creo
que lo llamaron así
es que el objetivo es nuestra
propia infraestructura.
Son programas a través
de los cuales la NSA
confunde intencionalmente
a los socios corporativos.
Les dicen que estos
son estándares seguros.
Les dicen que necesitan
trabajar con ellos
para asegurar sus sistemas,
pero en realidad dan malos consejos
que hacen que estas empresas terminen
degradando la seguridad
de sus servicios.
Están construyendo "puertas traseras"
que no solo
puede explotar la NSA,
sino cualquiera con tiempo y dinero
para investigar y encontrarlas
y usarlas para meterse
en las comunicaciones del mundo.
Esto es muy peligroso
porque si perdemos un solo estándar,
si perdemos la confianza
en algo como el SSL,
que fue un objetivo específico
del programa Bullrun,
viviremos en un mundo menos seguro
No podremos acceder al banco
y no podremos acceder al comercio
sin preocuparnos por personas que
monitorean las comunicaciones
o que las trastocan
para sus propios intereses.
CA: ¿Estas decisiones también abren
intencionalmente a EE.UU. ante
los ataques cibernéticos
desde otras fuentes?
ES: Seguro.
Uno de los problemas,
uno de los peligrosos legados
que nos dejó la era post 11-S,
es que tradicionalmente
la NSA ha usado 2 sombreros.
Han estado a cargo
de operaciones ofensivas,
como el hacking,
pero también estuvieron a cargo
de operaciones defensivas,
y tradicionalmente
siempre priorizaron
la defensiva sobre la ofensiva
basándose en el principio
que los secretos estadounidenses
simplemente valen más.
Si hackeamos una empresa china
y robamos sus secretos,
si hackeamos una oficina
gubernamental en Berlín
y robamos sus secretos,
eso tiene menos valor para
el pueblo estadounidense
que asegurar que los chinos
no tengan acceso
a nuestros secretos.
Entonces al reducir la seguridad
de nuestras comunicaciones,
no solo están poniendo
al mundo en riesgo,
sino que ponen a EE.UU. en riesgo
de manera intrínseca,
porque la propiedad intelectual
es la base,
el pilar de nuestra economía,
y si ponemos eso en riesgo
con una seguridad débil,
lo vamos a pagar durante años.
CA: Pero hicieron el cálculo
de que valía la pena hacer esto
como parte de la defensa de EE.UU.
contra el terrorismo.
Seguramente es un precio
que vale la pena pagar.
ES: Bueno,
al analizar los resultados
de estos programas
contra el terrorismo,
verán que no tienen fundamento
y no hace falta que
crean mi palabra,
porque tuvimos la primera
audiencia pública,
el primer tribunal
federal que lo analizó,
fuera del arreglo secreto,
y tildó a los programas
de orwellianos
y posiblemente
inconstitucionales.
El Congreso, que tiene acceso
para instruir sobre estas cosas,
y ahora desea hacerlo,
ha presentado proyectos
de ley para reformarlo,
y 2 paneles independientes
de la Casa Blanca
que revisaron toda la
evidencia clasificada
dijeron que estos programas nunca
han detenido ni un solo
ataque terrorista
inminente para EE.UU.
Entonces, ¿realmente estamos
parando el terrorismo?
¿Estos programas tienen algún valor?
Yo digo que no y los 3 poderes
del gobierno estadounidense
también dicen que no.
CA: ¿Crees que hay una motivación
más profunda para ellos
que la guerra contra el terrorismo?
ES: Perdón no te escuché, ¿puedes repetir?
CA: Perdón. ¿Crees que hay una motivación
más profunda para ellos
que la guerra contra el terrorismo?
ES: Sí. La conclusión
es que el terrorismo
siempre ha sido lo que en el
mundo de la inteligencia
llamaríamos una excusa
para la acción.
El terrorismo es algo que provoca
una respuesta emocional que permite
que las personas razonen
autorizando poderes y programas
que de otra manera no harían.
Programas del tipo Bullrun y Edgehill,
la NSA pidió autorización para ellos
allá por la década de 1990.
Le pidió al FBI que fuera al Congreso
y presentara argumentos.
El FBI fue y lo hizo.
Pero el Congreso
y el pueblo dijeron "no".
Dijeron que no valía la pena
arriesgar nuestra economía.
Es demasiado daño
en nuestra sociedad para
justificar las ganancias.
Pero lo que vimos,
en la era post 11-S,
es que usaron el secreto
y la justificación del terrorismo
para empezar estos programas en secreto
sin consultar al Congreso,
ni al pueblo de EE.UU.,
y es de ese tipo de gobierno
a puertas cerradas
del que tenemos que protegernos,
porque nos hace menos seguros
y no aporta valor.
CA: Bien, ven conmigo un segundo,
porque tengo una pregunta
más personal para hacerte.
Hablando del terror,
muchas personas consideran
tu situación actual
en Rusia muy aterrorizante.
Seguramente escuchaste lo que pasó,
el trato que recibió Bradley Manning,
ahora Chelsea Manning,
y salió una noticia en Buzzfeed
diciendo que
hay personas en la
comunidad de inteligencia
que te quieren muerto.
¿Cómo manejas esto?
¿Cómo manejas el miedo?
ES: No es ningún misterio
que hay gobiernos que
me quieren ver muerto.
Lo dejé en claro
una y otra vez,
que me voy a dormir
todas las noches
pensando qué puedo hacer
por el pueblo de EE.UU.
No quiero perjudicar a mi gobierno.
Quiero ayudar a mi gobierno,
pero el hecho de que quieran
ignorar por completo
el debido proceso,
que quieran declarar culpables
sin siquiera un juicio previo,
estas son cosas contra las
que tenemos que trabajar
como sociedad y decir
que no es apropiado.
No deberíamos amenazar
a los disidentes.
No deberíamos criminalizar
al periodismo.
Y lo que sea que pueda
hacer para ese fin,
lo haré con gusto
a pesar de los riesgos.
CA: Me gustaría recibir
algo de feedback
de la audiencia aquí presente,
porque sé que hay reacciones
muy distintas
hacia Edward Snowden.
Imaginen que tienen
las siguientes 2 opciones.
Consideran lo que hizo
fundamentalmente como
un acto imprudente
que puso a EE.UU. en peligro,
o lo consideran un acto
fundamentalmente heroico
que funcionará para EE.UU.
y el mundo entero
a largo plazo.
Esas son las opciones que daré.
Me gustaría saber quién vota por
la primera opción,
la de un acto temerario.
Se levantan algunas manos.
Algunas manos arriba.
Es difícil levantar la mano
cuando tienes al hombre ahí enfrente,
pero veo algunas.
ES: Puedo verlos.
(Risas)
CA: Y ¿quiénes van
por la segunda opción
la de un acto heroico?
(Aplausos)
(Ovación)
Creo que es cierto decir
que hay muchas personas
que no levantaron la mano y creo
que todavía lo están pensando,
porque me parece que el debate
no se divide por las líneas
políticas tradicionales.
No es izquierda o derecha,
no se trata
de estar a favor del gobierno,
de ser libertario ni nada de eso.
En parte es un problema generacional.
Uds. son parte de una
generación que creció
con Internet y parece que
se ven ofendidos
a un nivel casi visceral
si ven algo que
creen que puede dañar a Internet.
¿Hay algo de cierto en eso?
ES: Sí, creo que es cierto.
No se trata de ser
de izquierda o derecha.
Nuestras libertadas básicas,
y cuando digo nuestras,
no me refiero solo
a los estadounidenses,
sino a las personas
de todo el mundo,
no tiene que ver con
un problema partidario.
Estas cosas en las que creen
todas las personas,
y depende de todos
nosotros protegerlas,
y de las personas que
han visto y disfrutado
de una Internet libre y gratuita
depende de nosotros
preservar esa libertad
para que la próxima generación
pueda disfrutarla,
y si no cambiamos las cosas,
si no nos paramos
para hacer los cambios
que hay que hacer para mantener
la seguridad en Internet,
no solo por nosotros
sino por todos,
vamos a perderla,
y será una pérdida tremenda,
para nosotros y para todo el mundo.
CA: Bueno, escuché un
discurso similar hace poco
del fundador de la WWW
que creo que está con nosotros,
Sir Tim Berners-Lee.
Tim, de hecho, quiere decir algo,
¿tenemos un micrófono
para Tim?
(Aplausos)
Tim, qué bueno verte. Ven.
¿En qué bando estás, a propósito,
traidor o héroe?
Tengo una teoría pero...
Tim Berners-Lee: He dado respuestas
mucho más largas
a esa pregunta, pero héroe,
si tuviera que elegir entre las dos.
CA: Ed, creo que leíste
sobre la propuesta de
Sir Tim donde hablaba
de hacer una nueva Carta Magna
para recuperar Internet.
¿Tiene sentido?
ES: Por supuesto.
Mi generación y yo
crecimos no solo
pensando en Internet,
sino que crecimos en Internet,
y aunque nunca hubiese esperado
tener la oportunidad
de defenderla de una manera
tan directa y práctica
y encarnarla de esta manera
tan inusual y casi a lo Avatar,
creo que hay algo de poético
en el hecho que
uno de los hijos de Internet
se ha vuelto cercano a Internet
como resultado de
su expresión política.
Y creo que la
Carta Magna para Internet
es justo lo que necesitamos.
Necesitamos codificar
nuestros valores
no solo por escrito sino
en la estructura de Internet,
es algo que espero
y los invito a todos en la audiencia,
no solo aquí en Vancouver
sino en el mundo entero,
a unirse y participar.
CA: ¿Tienes una pregunta para Ed?
TBL: Bueno, 2 preguntas,
una pregunta general.
CA: ¿Ed, nos escuchas?
ES: Sí, los escucho.
CA: Volvió.
TBL: Pincharon la línea
y hubo una interferencia
por un momento.
(Risas)
ES: Es un problema de la NSA.
TBL: Desde los 25 años,
volviendo atrás y pensando,
¿qué dirías que es
lo mejor que hemos logrado
a partir de todas las discusiones
que tuvimos
sobre la web que queremos?
ES: Pensando en términos
de qué tan lejos podemos ir,
creo que es una pregunta
que solo está limitada
por lo que queremos poner dentro.
Creo que la Internet que
disfrutamos en el pasado
fue exactamente lo que
nosotros como nación
y como personas del mundo entero
necesitábamos,
y cooperando, dedicándonos no solo
a las partes técnicas como sociedad,
sino, como dijiste tú, los usuarios
las personas de todo el mundo
que contribuyen
a través de Internet,
de la redes sociales,
los que miran el clima,
los que confían en ello
como parte de su vida,
tenemos que defender eso.
Tendremos no solo
la Internet que tuvimos,
sino una mejor Internet,
un mejor presente,
algo que podamos usar
para construir el futuro
que será mejor
de lo que esperamos
y de lo que jamás
hemos imaginado.
CA: Hace 30 años que
se fundó TED, en 1984.
Hubo muchas charlas desde entonces
siguiendo el razonamiento de que
en realidad George Orwell
estaba equivocado.
No hay un Gran Hermano
que nos mira.
Nosotros, gracias al poder de la Web,
y la transparencia, estamos mirando
al Gran Hermano.
De alguna manera, tus revelaciones
le dieron una puñalada
al corazón de esa mirada
más bien optimista,
pero todavía crees que
hay algo para hacer
al respecto.
Y tú también.
ES: Exacto, se puede argumentar
que los poderes del Gran Hermano
han aumentado muchísimo.
Hace poco salió un
artículo legal en Yale
que establecía el principio
Bankston-Soltani
que decía que nuestra expectativa
de privacidad es violada
cuando las capacidades
de vigilancia del gobierno
se vuelven más baratas
en un orden de magnitud,
y cada vez que eso sucede,
tenemos que
revisar y reequilibrar nuestros
derechos de privacidad.
Eso no ha sucedido desde
que los poderes de
vigilancia del gobierno
aumentaron en varios
órdenes de magnitud,
y por eso tenemos el problema
que tenemos hoy
pero todavía hay esperanza,
porque los poderes de los individuos
también se incrementaron
con la tecnología.
Soy una prueba viviente
de que un individuo puede ir
cabeza a cabeza
contra los adversarios
más poderosos
y las agencias de inteligencia
más poderosas
del mundo y ganar,
y creo que eso es algo
que nos da esperanza,
y tenemos que construir sobre eso
para que sea accesible no solo
para los expertos técnicos
sino también para
los ciudadanos comunes.
El periodismo no es un delito,
la comunicación no es un delito
y no tienen que monitorear
nuestras actividades cotidianas.
CA: No sé cómo se le da
la mano a un bot,
pero me imagino que la mano es esta.
TBL: Pronto llegará.
ES: Un placer conocerte,
espero que me vean tan bien
como yo los veo a Uds.
CA: Gracias, Tim.
(Aplausos)
El New York Times pidió
una amnistía para ti.
¿Aceptarías una oportunidad
para volver a EE.UU.?
ES: Claro. Sin dudas,
los principios que han
sido el fundamento
de este proyecto
han sido el interés público
y los principios que subyacen
al establishment periodístico
de EE.UU.
y del mundo,
y creo que la prensa ahora dice
apoyamos esto,
esto es algo que tenía que pasar,
es un argumento fuerte
pero no es el argumento final,
es el público el que debe decidir.
Pero al mismo tiempo,
el gobierno dio a entender que quiere
un tipo de acuerdo,
que quieren que comprometa
a los periodistas
con los que trabajé,
a regresar,
y quiero dejar en claro
que no hice esto
para estar a salvo.
Hice esto para hacer lo correcto,
y no voy a detener mi trabajo
en interés del público
solo para beneficiarme.
(Aplausos)
CA: Mientras tanto,
por cortesía de Internet
y la tecnología,
estás de vuelta en América del Norte,
no en EE.UU., sino en Canadá.
¿Qué se siente?
ES: Canadá es diferente
de lo que pensaba.
Es mucho más cálido.
(Risas)
CA: En TED, la misión es
"Ideas que vale la pena difundir".
Si pudieras encapsular
todo en una idea,
¿cuál sería tu idea que
vale la pena difundir
en este momento?
ES: Diría que el año pasado
fue un recordatorio
de que la democracia puede morir
detrás de puertas cerradas,
pero los individuos nacemos
detrás de esas mismas
puertas cerradas,
y no tenemos que ceder
nuestra privacidad para
tener un buen gobierno.
No tenemos que ceder
nuestra libertad
para tener seguridad.
Trabajando juntos
podemos tener un gobierno honesto
y vidas privadas,
y espero trabajar con todos
en el mundo entero
para que esto pase.
Muchas gracias.
CA: Muchas gracias.
(Aplausos)