Este señor fue el recluso fundador del programa de la Universidad de Palo Verde además de ser un veterano de Vietnam altamente condecorado. Por favor, den la bienvenida a mi buen amigo James A. White Junior. (Aplausos) (Aclamaciones) Buenas tardes. Me gustaría que tomasen unos minutos para pensar en el futuro: no sobre tu futuro o el de tus comunidades sino el futuro de nuestra comunidad global Bueno, mi modelo hoy - voy a utilizar California - en realidad es predominante en el mundo. Y la cuestión es la siguiente: Por qué se gasta tanto dinero, demasiado dinero en muchos casos, en alojar gente de manera temporal, y más tarde en algún momento arbitrario, los ponemos en libertad en la comunidad para seguir con el mismo estilo de vida que, debo añadir, es lo que los llevó a la cárcel en primer lugar. Ahora, en el año 2000, el Departamento de Correcciones de California tenía más de 150 000 presos a un coste de casi USD 40 000 al año y un índice de reincidencia de más del 70 % Bueno, si prestan atención, si liberamos a 10 000 presos y 7000 vuelven y ahora, este año, el coste es USD 47 000 al año, es más de 325 millones que se gasta en consumidores que vuelven al sistema penitenciario. Ahora, para mí, estas cifras son ultraconservadoras y yo soy conservador. La razón es esta: Nadie vuelve por un año. Vuelven por tres, cinco, diez, 25 hasta cadena perpetua para aquellos que han cometido tres delitos. La Universidad de McGill en Montreal, Canadá y luego, posteriormente el Departamento de Justicia de EE.UU. realizaron ciertos estudios y estos estudios señalaron que la educación de un recluso, mientras está encarcelado, tiene una relación directa en la propensión de volver a una vida delictiva una vez puesto en libertad. Por lo tanto, se convierten en usuarios frecuentes del sistema penitenciario. Veamos, ¿cuál es el coste de la educación? La educación superior es cara. En el año 2000, en California, un título técnico costaba alrededor de USD 5700. Pero y si... ¿en vez de usar un libro para cada estudiante, usáramos un libro para cuatro o cinco estudiantes? ¿Y si sus tutores fueran sus compañeros que tienen una educación superior? ¿Y si todas las tareas administrativas las hicieran sus compañeros? ¿Y si implementásemos todos estos "y si"? Bueno, podemos bajar el coste hasta alrededor de USD 2500. Y en el año 2000, el Departamento de Correcciones de California y la Universidad de Palo Verde comenzaron un proyecto llamado Proyecto Ironwood. Aceptaron a 53 reclusos, dando paso así a 53 estudiantes. Bueno, después de varios semestres, todos estaban sorprendidos con los resultados. Y promovieron, animaron, empujaron a gente para matricularse. Y consiguieron hasta 650 al mismo tiempo. Ahora, lo que salió de esto fue impresionante. Para empezar, Palo Verde empezó a ofrecer cursos de tratamiento de drogas y alcohol, vaya trabalenguas. Y muchos de sus estudiantes tenían problemas de abuso por lo que se matricularon en los cursos para mejorar como personas. Pero después de atender a 10 o 12 cursos, descubrieron que estaban cualificados para hacer el examen de licencia estatal, llegando a ser especialistas certificados del tratamiento de alcohol y drogas. Entonces, no solo se estaban ayudando a sí mismos o a sus compañeros, sino que cuando vuelvan a la comunidad, van a ayudar a nuestra comunidad. Ahora, también pasó otra cosa. Muchos de nuestros estudiantes fueron puestos en libertad. Fueron a casa. ¿Y adivinen qué pasó? Continuaron con su educación. Miren, yo soy viejo; la educación es adictiva. Obtienes un poquito, y quieres más. (Risas) Así que, tenemos estudiantes que o han obtenido o están trabajando en sus licenciaturas, títulos universitarios, en asignaturas como biología, administración de empresa, ingeniería civil, física. Incluso un estudiante obtuvo una maestría en administración de empresas. Ahora, la cuestión es: ¿es este un buen proyecto? ¿Es rentable? El Departamento de Correcciones de California maneja el dinero, de eso va. Entonces, ¿es rentable? Aquí les presento los resultados después de recopilar los datos. De los primeros 53 estudiantes que se inscribieron, 52 se graduaron, un tercio con matrícula de honor. Hemos tenido numerosos, numerosos graduados con honores. Sentados en esta sala hoy hay estudiantes con una nota media de 9,0. (Aplausos) Hemos tenido 1288 graduados, y en seis semanas, tendremos 103 más. (Aplausos) Si miran los estudios del Departamento de Justicia, el 20 % debería volver. Entonces, ¿cuántos han regresado? Hasta julio del 2013 1,53 % ha vuelto a la cárcel. (Aplausos) (Aclamaciones) Ahora, tienen que entender, todo esto vino de una semilla, una pequeña idea. Intentémoslo, una semilla. Les debo decir que todos estos estudiantes se sienten muy agradecidos. Están agradecidos por la oportunidad, no solo por obtener una educación que sobrepasa sus expectativas, sino porque se les permitió un cambio en sus vidas con un poco de ayuda y se convierten así en mejores ciudadanos. Entonces, ¿qué significa todo esto para Uds.? El 95 % de los encarcelados en California van a volver a nuestras comunidades de verdad son nuestras comunidades. El 6,6 % de los californianos han estado o están en prisión en libertad condicional o vigilada. El 6,6 % una cifra muy pequeña. Solo es 1 de cada 15. Una cifra increíble. Entonces ¿de qué ha tratado mi charla hoy? Bueno, es fácil. Se trata de plantar semillas, de ir por el mundo plantando semillas. Así que, todo el mundo aquí, estoy viejo. Todo el mundo aquí sabe que esto es una manzana. Y todo el mundo en esta habitación cada uno de Uds., puede contar las semillas de una manzana. Pero ninguno, no en esta habitación, no hoy, ninguno cuando vuelva a su comunidad, nadie en la comunidad global puede contar las manzanas de esta semilla. Así que, lo que quiero que piensen es que hay una semilla plantada aquí en el desierto. Y con un poquito de agua, y un poco de cuidado, se convirtió en un pequeño y próspero huerto. Pero estamos en el desierto de California y hay sequía. Por lo que necesitamos un poco de agua. (Risas) (Aplausos) Necesitamos algún sustento y quizás, podamos tener un programa de licenciatura aquí. (Ánimos) (Aplausos) Así que, lo que quiero que hagan por mí, este viejo hombre en el escenario, es que mañana, mañana cuando salgan de casa vayan a plantar una semilla. Planten una semilla e imaginen sus infinitas posibilidades. Gracias.